Accidente de Iria

El 11 de noviembre de 2016 sufrí un trágico accidente en A Estrada pero, por suerte, sólo se quedó en un pequeño susto, ya que apenas tuve lesiones.

Una de las lesiones que tuve fue un corte en la mano debido a la rotura del cristal del parabrisas al querer salir del coche. Cuando llegué al centro médico no me limpiaron bien la herida y se me quedaron unos “pequeños” cristales dentro del corte.

Con el paso del tiempo, la herida cicatrizó y cuando movía la mano de forma continua sufría un ligero dolor que hacía que no pudiera escribir e incluso mover los dedos de la mano de forma normal. Por eso, volví al médico, y tras varias consultas decidieron hacerme una radiografía para saber qué era lo que tenía dentro. Llegaron a la conclusión de que había un cuerpo extraño (los cristales) pero que con un antibiótico el dolor disminuiría ya que haría que ese cuerpo extraño se encapsulase.

Tras tomar el antibiótico y tras pasar varios meses, volví de nuevo a la consulta para tomar nuevas medidas ya que el dolor seguía igual e incluso a veces era mucho peor. Decidieron operararme para sacarlo ya que yo me encontraba en 2º de bachillerato y debía utilizar la mano  de forma continuada. 

La operación fue en mayo del año 2018, 1 año y medio más tarde del accidente, y tras la extracción de los pequeños cristales, porque había más de uno, no como aparece en la radiografía, el dolor desapareció.